miércoles, 22 de mayo de 2013

26 DE MAYO - DIA NACIONAL DEL LIBRO

El 4 de agosto de 1815, el presbítero Dámaso Antonio Larrañaga envió una carta al Cabildo en la cual planteó la necesidad de crear una biblioteca pública donde pudiesen concurrir nuestros jóvenes, y todos aquellos que quisieran acceder al saber.

El propio Larrañaga se ofrecía para desempeñar la función de director, y solicitaba un edificio para instalarla, a lo que responde José Artigas: "...yo jamás dejaría de poner el sello de mi aprobación a cualquier obra que en su objetivo llevase esculpido el título de la pública felicidad. Conozco las ventajas de una biblioteca pública y espero que V.S. cooperará con el esfuerzo e influjo a perfeccionarla coadyuvando los heroicos esfuerzos de tan virtuosos ciudadano...".

Artigas, nuestro héroe, que se encontraba en el Campamento de Purificación, envió una nota fechada el 12 de agosto de 1815 al Cabildo, en la que manifestaba su acuerdo con la creación de la Biblioteca. 

El núcelo de la primera colección se forjó a partir de los aportes de libros realizados por José Manuel Pérez Castellano, José Raimundo Guerra, los padres franciscanos y las donaciones hechas por el propio Dámaso A. Larrañaga.

La primera Biblioteca Pública fue instalada en los altos del Fuerte de Montevideo, que se encontraba en la actual Plaza Zabala y fue abierta al público el 26 de mayo de 1816. 

El presbítero Dámaso Antonio Larrañaga, su primer director, en la "Oración Inaugural", expresó: 

"Una biblioteca no es otra cosa que un domicilio o ilustre asamblea en que se reúnen, como de asiento, todos los más sublimes ingenios del orbe literario o por mejor decir, el foco en que se reconcentran las luces más brillantes que se han esparcido por los sabios de todos los países y de todos los tiempos. Estas luces son las que el ilustrado y el Gobierno vienen a hacer comunes a sus conciudadanos."

El 30 de nayo de 1816, Artigas, sensible a la repercusión pública del hecho, dispuso que el santo y seña de su ejército en Purificación fuera: "Sean los orientales tan ilustrados como valientes".

Hoy, Biblioteca Nacional

En 1926 se adquirió el predio del actual edificio de la Biblioteca Nacional. La piedra fundamental se colocó el 26 de mayo de 1937, la nueva sede se ocupó en 1955, y finalmente, La Biblioteca Nacional se inauguró oficialmente en 1964.  Esta institución es la única que se mantiene de la Epoca Libertadora. 


Actualmente, el acervo de la Biblioteca Nacional está constituido por aproximadamente 900.000 volúmenes de libros, folletos y publicaciones periódicas nacionales y extranjeras. Atesora, además, un valioso archivo documental literario uruguayo, así como importantes colecciones de mapas, planos, fotografías, postales y grabados.


Fuente de datos: 
www.bibna.gub.uy
www.escueladigital.com.uy
www.uruguayeduca.edu.uy

martes, 21 de mayo de 2013


18 DE MAYO - BATALLA DE LAS PIEDRAS








"La Batalla de Las Piedras" óleo sobre tela de Manuel Rosé.


La situación antes de la Batalla

En los primeros días del mes de abril de 1811, Artigas se incorporó a la revolución, estableciendo su cuartel general en Mercedes. Desde allí, el 11 de abril se dirigió a sus compatriotas en lo que se conoce con el nombre de Proclama de Mercedes. Este documento termina con las siguientes palabras:


"A la empresa, compatriotas, que el triunfo es nuestro: vencer o morir es nuestra cifra y tiemblen, tiemblen esos tiranos de haber excitado vuestro enojo, sin advertir que los americanos del Sur están dispuestos a defender su patria y a morir antes con honor que vivir con ignonimia en afrentoso cautiverio".


Durante la batalla

El 12 de mayo, Artigas llegó a Canelones con unos 1000 hombres. Allí se enteró de que habían enviado un ejército para combatirlo, al mando de José de Posadas.

El 18 de mayo, los dos bandos se encontraron en la localidad de Las Piedras y entraron en combate. La batalla empezó un poco antes del mediodía y duró hasta las cuatro de la tarde aproximadamente. Artigas relató todos los detalles de esta batalla. 

"El 18 amaneció sereno; despaché algunas partidas de observación sobre el campo enemigo, que distaba menos de dos leguas del mío y, a las 9 de la mañana, se me avisó que hacían movimientos con dirección a nosotros".


"Se trabó el fuego con mis guerrillas, y las contrarias, aumentando sucesivamente sus fuerzas, se reunieron en una loma distante una legua de mi campamento".



En La Batalla de Las Piedras, Artigas se mostró como un general experto. Ideó una estrategia de combate que le aseguró la derrota del enemigo, para lo cual atacó no solamente por el frente, sino también por los costados y la retaguardia.

Al finalizar la batalla, Artigas pronunció las frases: 

"Curad a los heridos"
"Clemencia para los vencidos"
"Respetad a los prisioneros"

La situación ventajosa de los enemigos, la superioridad de su artillería, así en el número como en el calibre y dotación de 16 artilleros en cada una y el exceso de su infantería sobre la nuestra hacían la victoria muy fácil, pero mis tropas enardecidas se empeñaban más y más y sus rostros serenos pronosticaban las glorias de la patria.


Consecuencias de la Batalla de las Piedras


- Aumentó el prestigio militar de Artigas, quien a partir de este momento fue ascendido a coronel.
- Las tropas vencedoras  pusieron sitio a Montevideo.
- Las fuerzas de Buenos Aires recuperaron la confianza que habían perdido, luego de ser derrotados en Alto Perú y Paraguay.
- Con el deseo común de luchar por la libertad, se organizó lo que Artigas llamó el "ejército nuevo", formado por orientales de muy distinta condición social.


Fuente. www.lamochila.com.uy